Yoga antes de dormir

 Yoga

 contrariamente a lo que se piensa, una disciplina bastante exigente para cualquier cuerpo. Pero para disfrutar de los beneficios del yoga, no es necesario ser de goma. Por ejemplo, puedes intentar lo básico, como la meditación, que puede ayudar a disminuir la presión sanguínea, aliviar al estrés y mejorar la memoria.
Así que es hora de hacer un poco de yoga antes de ir a dormir. ¡Los beneficios son varios!

Empecemos con un poco de meditación

Solo siéntate cómoda y cruza las piernas. Estira bien la columna, relaja los brazos y respira hondo. Intenta calmar tu mente y concentrarte en tu respiración.

Estírate hacia adelante.

 estiramiento hacia adelante es genial si quieres dar una última estirada antes de dormir. Solo siéntate en la cama y estírate lentamente hacia adelante, luego junta los dedos de las manos con los dedos de los pies gentilmente.

Si no alcanzas a los pies, intenta los talones o los muslos, lo que resulte más cómodo. Recuerda respirar hondamente para mejorar el estiramiento.

Posición fetal.rrodíllate sobre la cama, con los pies detrás, y separa las rodillas a la altura de tus caderas.

Luego baja lentamente y recuéstate sobre tus muslos. Quédate todo el tiempo que te sientas cómoda y respira hondamente.

Estiramiento hacia atrás.

Esta posición hace maravillas al estirar la columna y la parte superior del cuerpo.

Empieza cruzando las piernas encima de la cama y coloca tu mano derecha en tu rodilla izquierda.
Luego pon tu mano izquierda en la cama detrás de ti, y gentilmente tuerce tu cuerpo hacia la izquierda. Gira también tu cabeza para que mires detrás de tu hombro izquierdo.
Respira hondamente, luego regresa al centro. Repite hacia el otro lado.

La Diosa reclinada.

Esta posición hace maravillas al estirar la columna y la parte superior del cuerpo.

Empieza cruzando las piernas encima de la cama y coloca tu mano derecha en tu rodilla izquierda.
Luego pon tu mano izquierda en la cama detrás de ti, y gentilmente tuerce tu cuerpo hacia la izquierda. Gira también tu cabeza para que mires detrás de tu hombro izquierdo.
Respira hondamente, luego regresa al centro. Repite hacia el otro lado.

Pies en pared

 para meditar, pero también aliviarás la tensión de las piernas.

Siéntate en la cama mirando a la pared. Recuéstate y extiende las piernas hacia la pared. Deja que tus brazos descansen a cada lado, con las palmas hacia arriba. Respira hondamente y siente cómo se estira tu espalda.

Una mecedora.

recuéstate sobre la espalda y abraza tus rodillas con tu pecho.

Cruza los tobillos y enrolla tus brazos sobre el empeine de los pies. Mece tu cuerpo hacia adelante para sentarte, luego rueda hacia atrás, exhalando mientras lo haces.

La posición del ave.ntensas físicamente, pero hace maravillas con las piernas.

Empieza apoyada sobre las manos y las rodillas sobre la cama. Recuerda mantener tus manos a la distancia de tus hombros.
Lleva la rodilla izquierda adelante, entre tus manos, y estira la pierna derecha hacia atrás. Exhala y dobla tu cuerpo hacia tu rodilla izquierda.
Quédate así cuanto quieras. Hazlo un par de minutos, si puedes, y luego cambia al otro lado.

El giro supino, en fácil. estiramiento es perfecto para las mañanas, justo antes de saltar de la cama.

Recuéstate en la espalda y abraza tus rodillas contra tu pecho. Sostén tus piernas con el brazo izquierdo y llévalas hacia la cama en tu lado izquierdo.
Deja que tu cabeza gire y mira hacia tu izquierda. Quédate así un rato y luego repite del otro lado.

La posición del pez. estiramiento puede ser difícil al principio, especialmente si sufres de dolores de espalda. ¡Pero es uno de los más interesantes!

Recuéstate sobre tu espalda y pon tus manos debajo de las caderas. Luego, levanta tu pecho lentamente, y estira lentamente la cabeza hacia atrás.
Quédate así un rato, luego baja y repite