Esta semana

  

5 de marzo (desde el grado 13 de Aries) hasta el 15 de abril (en el grado 27 de Piscis). Las etapas de retrogradación de Venus duran unos 40 días y se producen una vez cada 19 meses aproximadamente. Son tiempos apropiados para revisar lo que nos gusta y lo que no, las relaciones sentimentales y eróticas, así como todo lo que tiene que ver con el amor, empezando por el amor a uno mismo.
Aún puedes disfrutar -hasta el 18 de este mes de marzo- del espectáculo maravilloso que ofrece Venus tras la puesta de Sol. Si miras hacia el oeste, verás a simple vista una poderosa luz que se va bajando hasta desaparecer por el horizonte. Se trata de la estrella o lucero de la tarde.
Tras su periodo de invisibilidad, reaparecerá por el horizonte este, poco antes de que salga el Sol, ofreciendo igualmente un espectáculo que anima el día. Entonces Venus se convierte en la estrella o lucero del amanecer. Eso sucederá el 31 de marzo.

SU PROFUNDO SIGNIFICADO

Mientras el planeta del amor permanece invisible, tiene un profundo significado. Es como un viaje a lo más profundo del simbolismo y significado del planeta. Señala, por tanto, una etapa para profundizar, para ver aspectos que permanecen en nuestra propia oscuridad o en la zona inconsciente de nuestras relaciones. Podemos aprovechar, pues, para ser más conscientes de aspectos que necesitamos ver y, en consecuencia, para corregir ciertas cuestiones o llegar a ser algo más completos. En este caso, al tratarse de Venus, podemos llegar a ser más felices, a mejorar las relaciones personales, empezando por las relaciones con nosotros mismos, es tiempo de ver cómo podemos mejorar la forma de amar y ser amados.
También puede ser la ocasión de renovar la estética y todo cuanto tiene que ver con el placer y el bienestar. Al fin y al cabo, se producirá, durante ese periodo, la conjunción con el Sol, en concreto el 25 de marzo. De ahí que ofrezca una nueva oportunidad, la posibilidad de empezar un nuevo ciclo, con nuevas tendencias, en todo lo que es propio de este planeta: amor, sexo, dinero, afectos, deseos, lo que nos gusta y lo que no…

EL PODEROSO MENSAJE DE LOS MITOS

Hay numerosos mitos que hablan de este tipo de pasajes que podemos denominar de iniciación, como el de diosa Ishtar de la antigua Babilonia. Se trata de un rito por el que la diosa desciende al inframundo para buscar el retorno de su amado Tammuz. Era la forma que tenían los antiguos astrólogos de transmitir sus enseñanzas.
No se trata, por tanto, de pensar, como algunos creen, que el periodo de retrogradación de un planeta es malo para los asuntos que simboliza ese planeta, sino de entender el profundo mensaje que conlleva para ayudarnos a completar nuestra tarea en este mundo. Hemos comentado muchas veces que no conviene demonizar los lazos de retrogradación de los planetas, sino tomarlos como lo que realmente son: oportunidades para revisar y poner al día lo que ese planeta nos indica, como maestro que es, porque es todo planeta, un maestro, un guía, un punto de luz en el camino.
Claro que, si el mensaje no entiende, no se le presta atención o alguien quiere persistir en sus trece, aunque sea en hábitos o relaciones tóxicas, ese simbólico y poético descenso de Venus al inframundo no será aprovechado para tal persona. Más bien todo lo contrario, porque, como dice Jung, aquella parte del inconsciente que no estamos dispuestos a elevar al consciente se convierte en destin